Uno de los motivos por los que cada vez más me voy interesando en los videojuegos españoles y por los que este proyecto ha decidido enfocarse exclusivamente en ellos es que muchas veces es imposible enterarse de gran parte de los juegazos desarrollados en España que van saliendo durante un mismo año, a no ser que haya suerte y, gracias a Dios, funcionen tan bien que consigan tener mucha visibilidad a través de los medios más importantes sobre videojuegos, tanto de España como del mundo entero. Pero tanto yo como vosotros sabemos que esa visibilidad la generamos más algunos proyectos pequeños que quienes tienen todas las herramientas para dar ese impulso a nuestra industria.
De verdad que me extraña muchísimo que me haya tenido que enterar de la existencia de este Super Magbot desarrollado por el estudio barcelonés Astral Pixel porque alguien (el magnífico Javier Larrea, CM de JanduSoft y miembro de DeVuego) compartió sus partidas del juego a través de X/Twitter cuando desde 2021 no he visto ningún análisis en alguna de mis webs preferidas sobre videojuegos. Y pienso que tiene delito, pues me parece un juego igual de bueno que un Celeste al que se le ha dado mucho bombo en los últimos años, algo que no quita que sea un juegazo. Pero bueno, tenemos la suerte de que Super Magbot aún sigue estando disponible tanto en Steam como en Nintendo Switch (encima muchas veces está de oferta y se puede conseguir por 2 euros) y eso me ha permitido descubrir uno de los mejores plataformas que he jugado en mi vida.
Super Magbot nos cuenta que, por primera vez en la historia, las fuerzas magnéticas igualaron su poder y colisionaron formando la estrella Magnetia, iluminando así la oscuridad del vasto universo. Dicha colisión provocó la creación de varios meteoritos magnéticos que cayeron en gran parte de los planetas de la galaxia, algunos de ellos incluso llegaron a introducirse en el núcleo central de estos lugares transformándose en fragmentos planetarios de un inmenso poder. Esto llamó la atención de Magsteroide, un malvado asteroide con ansias de poder que pretende comerse la estrella Magnetia y todos los planetas para volverse el ser más poderoso de la galaxia, algo que el bueno de Super Magbot intentará evitar recuperando todos los fragmentos planetarios a lo largo de los más de 144 niveles que tiene este juego.
Un juego que tiene como principal influencia a Super Meat Boy, pues los niveles no suelen durar más de 20-30 segundos a excepción de los enfrentamientos contra jefes finales. Justamente Celeste sería el otro referente a combinar con las aventuras del pequeño trozo de carne, pues las pantallas del título desarrollado por Astral Pixel plantean unos retos bastante intensos tanto en sus niveles normales como en las variaciones avanzadas que se desbloquearán al terminar cada mundo, provocando muertes constantes al mínimo fallo de concentración. Pero hay que destacar que Super Magbot es un juego muy valiente, pues tiró a la papelera de reciclaje una de las mecánicas más básicas e importantes del género como es el salto del personaje para ofrecer una jugabilidad diferente basada en la atracción y en la repulsión de objetos por las posibilidades del magnetismo.
Para hacer uso de estas mecánicas, los cuatros mundos de Super Magbot van presentando diferentes mecánicas o elementos con los que el robot magnético podrá moverse a lo largo del escenario usando estos poderes, ofreciendo una gran variedad de aplicaciones a cada nivel que funcionan a la perfección y consiguiendo que el jugador se olvide en todo momento de que le falta un botón para poder saltar. Una pantalla habitual de Super Magbot consiste en rebotar con el polo del mismo color para coger altura, usar la atracción de los polos como gancho para coger velocidad y aprender el uso de burbujas, impulsos o muros de rebote que cambian totalmente la teoría de los imanes. Todo ello ofreciendo una experiencia bastante intensa por la cantidad de muertes que se irán sumando en un mismo nivel porque el camino es complicado o porque siempre querremos recoger los dos fragmentos planetarios que hay desperdigados, pero con un fantástico aprendizaje gracias al ensayo y error sumado a esa sensación de adrenalina que provocará una sonrisa de oreja a oreja en el jugador una vez vea superado ese escenario tras, por ejemplo, 40 minutos. La experiencia de Super Magbot cambiará ligeramente cuando toque enfrentarse a los jefes finales de cada uno de los mundos, los cuales serán escenarios que combinarán todas las mecánicas aprendidas con los ataques correspondientes de estos enemigos, consiguiendo ser unos niveles que también destacan dentro de las 27 pantallas que hay en cada planeta. Una vez superados, se desbloquean unos mundos fragmentados que recuerdan mucho a esas pantallas alternativas de Super Meat Boy, solo que aquí los niveles parecen ser creaciones totalmente nuevas más que rediseños aún más complicados.
Como os estoy contando, Super Magbot no es que sea un juego demasiado sencillo debido al constante desafío de sus niveles, pero cuenta con unas interesantes opciones de ayuda que permitirán poder disfrutar de este maravilloso juego a cualquiera que no sea capaz de afrontar los retos que presenta el título. Se pueden activar cargas infinitas para ambos polos, poder mantener en el aire al robot para apuntar bien el siguiente movimiento o activar puntos de control a lo largo del nivel, siendo ésto último una opción super interesante. Todos pueden disfrutar de un juego que, más allá de sus retantes niveles, ofrece una banda sonora y una estética pixel art que son fantásticos. Destaco sobre todo la música, pues no se hace pesada en situaciones donde podemos estancarnos en un nivel durante horas y en todo momento me ha recordado a la banda sonora de mi queridísimo Shovel Knight.
En general, las aventuras de Super Magbot derrochan mucha calidad y, a su vez, le dan una vuelta a las mecánicas del género de los plataformas para ofrecer una experiencia diferente a lo habitual, pero sorprende muchísimo que, después de casi 3 años, su repercusión haya sido muy nula cuando realmente se le podría considerar como uno de los mejores juegos españoles que ha salido en estos últimos años, siendo esta mi opinión como fan de los plataformas. Ojalá esta reseña sirva para que más gente, sea aficionada o no del género, pueda descubrir un juegazo muy completo, muy desafiante y, sobre todo, con mucho magnetismo.